La agrupación española se presentó ante un lleno total en el Auditorio Pabellón M.
En punto de las 9:15 y con los acordes de “Estoy Contigo” dio inicio la muy esperada presentación en concierto del grupo español La Oreja de Van Gogh.
No quedó un asiento vacío en el auditorio del Pabellón M de Monterrey, pues más de cuatro mil espectadores se dieron cita en el lugar para disfrutar de una velada de recuerdos y presente.
“El Último Vals”, “Cuídate”, “Paris” y “Esa Chica” fueron algunos de los temas que interpretó Leire Martínez junto a su grupo, ya querido y acogido con cariño por el público regiomontano.
“Muy buenas noches, Monterrey y bienvenidos a nuestro planeta imaginario” así le dio la bienvenida la vocalista del grupo a su público.
“La casa está llena, Monterrey. Tres años sin regresar en concierto y esta noche venimos con nuestro Planeta Imaginario, en él hay muchas historias de amor, desamor, amores que con 20 años creían que iban a ser para siempre, invencibles, eternos. Pero la edad nos ha enseñado que si no se cuidan también se mueren. Porque no hay amores intocables” mencionó Leire como preámbulo del tema que lleva ese nombre: “Intocable”
El público se puso de pie, bailó, cantó y aplaudió los temas de “Diciembre” y “20 de Enero”. Un momento especial de la noche fue cuando Leire recordó su anterior proyecto Primera Fila, el primero que realizaron fuera de España, y que se llevó a cabo aquí en México. “Cuando cantamos estos temas es inevitable acordarnos de México”, expresó.
“Lo que este país ha demostrado al mundo es increíble, la hermandad, la generosidad, la solidaridad; ¡es algo único! Gracias y muchísima fuerza, México.” A estas palabras siguió el tema “María”.
El público pidió el regreso al escenario de los españoles después de su primera despedida y esto dio pie a cuatro temas más: “Jueves”, “La Playa”, “Pálida Luna”, “La Niña que Llora en Tus Fiestas”.
De nuevo se despidieron del público, pero éste les aclamó hasta regresarlos una vez más al escenario. Con su generosidad y entrega, La Oreja de Van Gogh interpretó “Cometas por el Cielo” y “Puedes Contar Conmigo”, tema con la que pusieron punto final a su inolvidable presentación.
Sin una producción vistosa, ni elaborada escenografía, sólo talento de extraordinarios músicos , una comunión innegable con su público y 20 años de carrera, La Oreja de Van Gogh reafirma su consolidado lugar entre los favoritos de siempre.
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