Es impresionante la manera en la que «If» te hace conectar con tu niño interior; con tu infancia; con las cosas que amabas cuando eras niño. John Krasinski logra de gran manera hacer viajar a la audiencia al pasado y rememorar esos momentos que marcaron la infancia. Y lo mejor es que pese a que esto pueda sonar muy dramático, la realidad es que la película está hecha perfectamente para público joven y saca muchas risas a lo largo de su duración.
Sabemos que es extraño ver a Krasinski en la cinta luego de haberlo visto envuelto en un drama de terror con «Un lugar en el silencio», pero el humor que habita en él desde The Office sigue vigente y más que nunca, con apariciones que te alegran la experiencia.
Antes de continuar, por si no lo sabían, esta historia fue creada por el mismo Krasinski con la intención de dar vida a un mundo imaginario para sus hijas, y lo logró.
Ahora bien, la trama cuenta la historia de Bea, una niña casi adolescente que se encuentra en una situación agustiosa luego de perder a su madre y ver a su padre enfermar. Ella tiene que mudarse con su abuela, donde aparentemente tiempo atrás vivía, y esto le hace abrir la puerta a un mundo mágico en el que aprenderá a amar a su niña interna.
En este viaje Bea conoce a una serie de amigos imaginarios que perdieron a su «niño» debido a que éste ha crecido, pero Bea tomará la misión de ayudarlos a reencontrarse con ese espíritu infantil que todos llevamos dentro, lo que les devuelve la vivacidad a los personajes.
De la mano de Cal (Ryan Reynolds), Bea se une a una aventura bastante divertida y mucho muy emotiva.
Ya te hemos contado de qué va, y no queremos ir más allá, solo te advertimos que el final te hará derramar algunas lágrimas. Advertido estás.
Sin duda esta cinta de John Krasinski te hace abrazar la infancia y volver a aquellos días despreocupados.
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