Es increíble hasta donde puede llegar el fanatismo de alguien, y esta vez Taylor Swift es una de las víctimas.
Se ha informado que un hombre, identificado como David Crowe, fue arrestado por segunda vez en un lapso de tres días por visitar al menos 30 veces la casa de la cantante en Nueva York en los últimos dos meses.
De acuerdo con las autoridades, el hombre pedía hablar con Swift durante sus apariciones, y fue el pasado lunes cuando llegó al límite pues intentó ingresar a la propiedad.
Crowe fue procesado el pasado miércoles por tres cargos separados, entre los que se incluyen el acecho en cuarto grado y el acoso en primero y segundo grado.
Actualmente un juez le concedió la libertad supervisada con condiciones estrictas, además de por supuesto una orden de protección que le prohibe tener contacto con la cantante.
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