Envueltos en caramelos, risas, ingenio y mucho chocolate, disfrutamos de la nueva película de «Wonka», que nos dejó encantados y nos alegró el corazón con cada escena.
Desde que se dio a conocer su futura existencia, esta película ha estado haciendo ruido entre el público, y es que mucho se espera de esta nueva adaptación de la historia de Willy Wonka luego de que Johnny Depp nos volara la cabeza en 2005 con «Charlie y la fábrica de chocolate».
Sin embargo, es muy importante destacar que esta nueva cinta protagonizada por Timothée Chalamet es un giro completamente distinto a la adaptación de Depp, no un remake como muchos esperaban que fuera. Este 2023 la fábula de Roald Dahl cobra vida de otra forma y deja a sus espectadores, más literal que nunca, con un buen sabor de boca.
La trama cuenta la historia de Wonka antes de convertirse en el rey y maestro del chocolate; antes de que aquel gigantesco imperio de azúcar y cacao cobrara vida. Sus hagallas y talento para el arte del cacao lo llevaran a querer cumplir su sueño de niño, llevando siempre con él las palabras de su amada madre. Sin embargo, así como Willy goza de un virtuosismo maravilloso, también cuenta con una ingenuidad que lo hace pecar de inocente, y por ende, de cometer algunos errores que lo descarrilarán del camino, todo eso sumado al enorme peso que tiene el monopolio chocolatero que hará hasta lo imposible por deshacerse de Wonka.
Sin embargo, el sol existe para todos, y es que dentro de ese tumultuoso camino Willy se encuentra con personas dispuestas a ayudarle a cumplir su sueño y a cambiar su destino luchando contra todo tipo de adversidades que te envolverán en una experiencia cómica y musical única.
La historia va cobrando vida a través de múltiples números musicales perfectamente ejecutados con coreografías de lujo. Todos los personajes se llevan un diez en ello pues crean una atmósfera muy inspiradora.
En lo que respecta a la escenografía y estética, ésta es basada principalmente en la cinta de 1971 con Gene Wilder, pues en los mismos vestuarios puede verse plasmada a la perfección, así como también en lo colorido de todas las escenas.
Y el que se llevó los aplausos definitivamente fue Timothée Chalamet, quien como pez en el agua fluyó tanto en la actuación como en los musicales haciendo brotar un optimismo capaz de traspasar la pantalla, regalándonos un personaje impecable e insignia.
El plus: Hugh Grant como Oompa Loompa es espectacular. El carisma de este pequeño ser y ese sentido del humor tan peculiar hace que se convierta en uno de los personajes favoritos de esta entrega.
En resumen, «Wonka» es una película que resultará memorable para quien la vea, y que transforma poco menos de dos horas en un cúmulo de alegría, diversión e ilusión.
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